El contrapeso que tiene el presidente de Colombia, Gustavo Petro, a sus continuas participaciones antisemitas en diversos escenarios, ha logrado que, en Colombia, solamente hubiese hasta ahora una manifestación agresiva verbalmente pero no violenta, pro-palestina que en realidad se podría llamar pro-Petro.

Este contrapeso se llama: comunidades cristianas evangélicas y mesiánicas, además de las nuevas comunidades judías en Colombia.

Personajes como el pastor Eduardo Gómez (relaciones internacionales pro Israel), El pastor Héctor Pardo (Iglesia Cristiana Carismática Tabernáculo de la Fe, única que siempre tuvo su embajada en Jeruslem), El pastor Darío Silva (Casa Sobre la Roca), pastor César Castellanos (Misión Carismática), pastor Ricardo Rodriguez (Avivamiento), pastor Raúl Rubio (Kehilat mesiánica de Yovel), junto con las nuevas comunidades judías (emergentes), forman un grueso que varios de ellos están involucrados en el medio político, militar, intelectual, etc.

A estos personajes y comunidades se une también la Asociación Shalom de exbecarios que viajaron a Israel en algún momento becados por la Embajada de Israel y hoy también nos dan la mano.

Son varias las actividades y oraciones, que actúan como influencers dentro de sus congregaciones que guían a sus feligreses a amar al pueblo de Israel, a las comunidades judías, a buscar la verdad, a entender la Palabra Divina. La diversidad de obras de beneficencia que manejan estas congregaciones y que han traído grandes beneficios al país y gracias a ellos, se amortiguan las fake news que varios medios de comunicación entregan a su audiencia.

En el video que se ve al principio de la nota, es una muestra de una de las muchas reuniones multitudinarias.

Las comunidades cristianas, evangélicas y Mesiánicas, no dan paso atrás, siguen aún sus manifestaciones de solidaridad, cada día algo nuevo.

Muchas gracias queridas comunidades cristianas y mesiánicas, esta vez, no nos sentimos solos. Dios los bendiga.